Para empezar, una empresa certificadora es una organización independiente que está acreditada por el organismo nacional competente que a su vea es miembro del Foro Internacional de Acreditación. Esto asegura que la empresa que certifica tu sistema de calidad está capacitada para hacerlo conforme a los estándares vigentes.
Algunos criterios que debería considerar antes de escoger un organismo para su certificación son:
- Evaluar si la organización certificadora posee auditores competentes y con experiencia en su área de negocio.
- Verificar que el certificado que otorga dicho organismo es reconocido por sus clientes y partes interesadas.
- Comprobar si el organismo ha evolucionado y su enfoque se adapta a las normas que quiere certificar. También hay que tener en cuenta que sean capaces de certificar otras normas de calidad, por si en un futuro desea integrar otros sistemas.
- Contrastar la acreditación del organismo certificador.
Al igual que en el caso de los despachos consultores y de capacitación, existe una enorme cantidad de opciones para elegir en cuanto a organismos de certificación y la regla de oro es no dejarse guiar por promesas de reducción de costes por parte del organismo. La decisión que toma al elegir el organismo es tan importante ya que la relación que seguirá con este no es puntual sino a largo plazo.
Hoy en día existen varias entidades certificadoras como, por ejemplo:
- AENOR (Asociación Española de Normalización y Certificación).
- Applus – LGAI Technological Center.
- Grupo SGS.
- TÜV Rheinland.
- BVQI. Bureau Veritas Quality Internacional.
- LRQA Business Assurance.
- CSQ.
- Q (ICTE).
Antes de empezar con el proceso de certificación es recomendable que la empresa realice auditorías internas, para analizar el funcionamiento del sistema, verificar si los objetivos se cumplen y realizar acciones correctivas.
Una vez que se ha decidido a que organismo se va a acudir, los pasos para el proceso de certificación del sistema son los siguientes:
Auditoría externa.
Cuando ya se ha elegido el organismo, el auditor enviado se reunirá con la gerencia para conocer los distintos procesos de la empresa. Revisará principalmente el manual de gestión de la calidad para verificar que el mismo cumpla con los requisitos que plantea la norma. En caso de inconsistencias, hará las recomendaciones necesarias y esperará a que la empresa realice los cambios o acciones correctivas.
Una vez que se verificó la documentación, la empresa y el auditor deciden en conjunto el momento en el que se realizará la auditoría de las instalaciones. Entre las herramientas que utiliza, además de la observación, puede efectuar entrevistas con el personal o generar algún muestreo.
Informe de la auditoría. El auditor debe comparar la información que recabó mediante la auditoría, con la documentación del sistema de gestión de la calidad que planteó la empresa; con la finalidad de encontrar no conformidades. Este informe se entrega a la gerencia, especificando cada una de las no conformidades con la norma, y clasificándolas de acuerdo a su grado de importancia.